¿Sabías que el nivel de proteínas que consumes a diario podría afectar tu microbiota? Un informe reciente señala que consumir mucha proteína combinada con ejercicio físico podría desequilibrar las bacterias de tu aparato digestivo y traer consecuencias perjudiciales para tu salud. ¡Quédate para saber más y conocer las claves para cuidar la microbiota!
El informe Protein and Sport: Alternative Sources and Strategies for Bioactive and Sustainable Sports Nutrition es un trabajo de investigación llevado a cabo por dos universidades madrileñas que analizan los principales aportes de la ciencia en relación a las proteínas. Uno de los estudios que menciona señala que una ingesta elevada de proteínas combinada con ejercicio podría disparar el estrés oxidativo.
El estrés oxidativo es un estado en el que hay demasiadas moléculas inestables llamadas radicales libres en el organismo y no hay suficientes antioxidantes para eliminarlas. La consecuencia inmediata es el daño celular y de los tejidos, lo que provocaría un desajuste en la microbiota intestinal.
¿Qué es la microbiota intestinal y por qué es importante cuidarla?
En nuestro sistema digestivo tenemos una colonia de bacterias “buenas” y “malas” que regulan los procesos fisiológicos. Esta convivencia desempeña un papel clave en la absorción de nutrientes y en la síntesis de ácidos grasos y vitaminas como la B12 y la K. Además, una colonia equilibrada de bacterias intestinales favorece la síntesis de metabolitos, una sustancia beneficiosa producida durante la digestión.
Durante los últimos años, la ciencia ha estudiado la microbiota en profundidad y por qué es importante cuidar a estos pequeños microorganismos que se encuentran en el intestino. Todo indicaría que una falta de equilibrio de nuestra microbiota intestinal está relacionado con algunas enfermedades. Por ejemplo, el síndrome del intestino irritable, la enfermedad de Parkinson, la obesidad, la diabetes tipo II y otras enfermedades autoinmunes.
Por eso nos preocupa lo que señala el informe y es que la ingesta de proteínas en exceso combinada con el ejercicio físico puede afectar la producción de metabolitos provocando así efectos adversos y un posible desajuste en la microbiota intestinal. ¿Qué hacer, entonces?
Proteínas + probióticos = combinación imbatible
Según la Sociedad Internacional de Nutrición Deportiva (ISSN, por sus siglas en inglés), los probióticos que se obtienen de alimentos como el kéfir, la kombucha y el chucrut podrían contribuir positivamente a la mejora de la salud de la persona deportista porque:
- fortalecen la función de la barrera intestinal, para protegerte de microorganismos “malos”
- mejoran tu sistema inmunitario porque intestino puede absorber los nutrientes adecuadamente
- reducen el daño muscular y favorecen la recuperación post entrenamiento
En medio del estudio de los probióticos, merece la pena destacar un trabajo firmado por Jäger y su equipo. Estos científicos observaron que un probiótico llamado Bacillus coagulans mejoraba la absorción de proteínas y aminoácidos. A través de un ensayo, decidieron evaluar los efectos en atletas de esta cepa combinada con proteínas vegetales y notaron que el nivel de absorción de aminoácidos aumentó en comparación con quienes habían recibido un placebo. El equipo atribuyó estos resultados a unas enzimas que contienen los probióticos y que actúan en el intestino grueso.
En un estudio más reciente, se analizó el efecto de esta cepa con proteínas lácteas, obteniéndose resultados similares. En definitiva, todo apunta a que la combinación de probióticos con proteínas podría contribuir a superar los problemas de la microbiota relacionados con una dieta rica en proteínas.
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Fuente: López-Martínez MI, Miguel M and Garcés-Rimón M (2022) Protein and Sport: Alternative Sources and Strategies for Bioactive and Sustainable Sports Nutrition. Front. Nutr. 9:926043.